Jugadores y personal de los Dodgers de Los Ángeles, incluidos Mookie Betts, Shohei Ohtani y el novato Roki Sasaki, así como de los Rockies de Colorado estuvieron presentes en el homenaje a Jackie Robinson en su Día frente a su estatua en el Centerfield Plaza a las afueras de Dodger Stadium. En la ceremonia también se hizo presente el miembro del Salón de la Fama del Baloncesto, Kareem Abdul-Jabbar, quien no ocultó su profunda admiración por Robinson y además contó anécdotas de su infancia en Manhattan. «Me peleaba con las personas de los Gigantes, los Yankees, bastante a menudo», contó. «Pero mantenía mi gorra puesta y nadie podía quitármela. Era muy alto. Él significaba excelencia, darlo todo, dar lo mejor de ti. Y para todos los detractores que están ahí, simplemente hay que ignorarlos y seguir adelante». Asimismo, el manager de los Dodgers; Dave Roberts, resaltó la importancia de mantener su legado vivo no solo por lo que hizo en el terreno, sino en el plano de la vida. «No es solo un día único. Entendemos lo que este hombre hizo por nuestro mundo, nuestro país. Así es como se vive la vida. Esto es algo para mí, mantener su legado vivo». «Una de las cosas que Jackie obviamente supo desde temprano, es que la vida iba a ser difícil», expresó Roberts. «Él era especial y fue puesto en esta posición particular para elevarse y saber que no se trata sólo del juego de béisbol. Es más grande que él». El acto en el Centerfield Plaza también contó con Sonya Pankey Robinson, la nieta mayor de Jackie y Rachel Robinson, y la única hija de Jackie Jr.; que murió en un accidente de transito en 1971 a los 24 años. La otra nieta, Ayo Robinson, hija de David Robinson, también estuvo presente. «Él fue tan progresista en muchos sentidos», comentó Pankey Robinson sobre su abuelo. «Cuando pienso en él con cariño, sólo pienso en todas sus contribuciones a la sociedad y a nosotros como familia. Siento una verdadera responsabilidad de mantener sus valores y tomo ese trabajo muy en serio». Fuente: Lider en Deportes