Publicado: 01/05/2025 08:59 PM La Internacional Antifascista, este jueves 01 de mayo, emitió un comunicado por medio del cual denuncia que el secuestro de Maikelys Antonella Espinoza Bernal,la bebé venezolana de apenas dos años, secuestrada por las autoridades migratorias de Estados Unidos, es un crimen de lesa humanidad. En el comunicado, publicado por el viceministro para América Latina y el Caribe, Rander Peña, en su cuenta de la red social Telegram, asegura que «estecrimen no es un error burocrático: es necropolítica en acción». «El gobierno de EE.UU., mediante sus agencias de control fronterizo, decide quienes merecen vivir en libertad y cuáles deben ser sometidos a la muerte social, pretenden decidir impunemente quien vive y como viven, ejecutan desapariciones forzadas de infantes y separaciones familiares», señala la misiva. A continuación el texto integro del comunicado: EL SECUESTRO DE MAIKELYS ESPINOZA ES UN CRIMEN DE LESA HUMANIDAD! NECROPOLÍTICA IMPERIAL CONTRA LA NIÑEZ. Hoy el mundo es testigo de prácticas bárbaras, y la expresión más cruel y malévola de estas es el secuestro de niños(as) como forma de castigo político. Desde la Internacional Antifascista denunciamos y rechazamos contundentemente el secuestro de Maikelys Antonella Espinoza Bernal, una bebé venezolana de apenas 2 años, arrancada del seno de su familia por las autoridades migratorias de Estados Unidos en abril, en un acto perverso y profundamente inhumano. Sus padres fueron acusados sin pruebas ni debido proceso de pertenecer a una supuesta organización criminal, revelando el carácter racista, xenófobo y neonazi de un sistema migratorio que actúa como maquinaria de represión y odio contra los pueblos del Sur Global. Este crimen no es un error burocrático: es necropolítica en acción. El gobierno de EE.UU., mediante sus agencias de control fronterizo, decide quienes merecen vivir en libertad y cuáles deben ser sometidos a la muerte social, pretenden decidir impunemente quien vive y como viven, ejecutan desapariciones forzadas de infantes y separaciones familiares. Maikelys es hoy una víctima de esta lógica genocida que, bajo la retórica de «protección», ejerce soberanía sobre su vida arrebatándole su identidad, su familia y su futuro. ¿Dónde queda el «interés superior del niño» cuando el Estado utiliza a la niñez migrante como botín de guerra? ¿Qué justicia puede haber cuando las instituciones convierten la frontera en un espacio de excepción donde los derechos humanos se suspenden? Esto no es «ley y orden»: es terrorismo de Estado, una repetición escalofriante de los métodos fascistas que arrancaban hijos de madres judías, indígenas o disidentes para borrar su existencia. La necropolítica imperial no solo encarcela a Maikel Espinoza en un campo de concentración en El Salvador (como parte de la criminalización de la migración), sino que condena a Maikelys a un limbo jurídico y emocional, negándole incluso el derecho a sentir el calor de los brazos de su madre, Yorely Bernal, quien hoy clama con dignidad insurrecta: ¡Devuélvanme a mi hija! Exigimos: 1. Libertad inmediata de Maikelys Espinoza y su reunificación con su familia en Venezuela. 2. Fin a las políticas necropolíticas que convierten a niños migrantes en rehenes del imperialismo. 3. Desmantelamiento de los campos de detención y cese de la criminalización de la migración. Llamamos a la solidaridad internacional: sindicatos, movimientos antirracistas, colectivos feministas y defensores de derechos humanos a sumarse a la campaña #FreeMaikelysEspinoza. No nos callaremos hasta verla libre, ni hasta que cada niño robado por el fascismo regrese a casa. NO PERMITIREMOS QUE LA NECROPOLÍTICA IMPERIAL SIGA DECIDIENDO QUIÉN VIVE, QUIÉN MUERE Y QUIÉN ES CONDENADO A DESAPARECER EN SILENCIO Fuente: Mazo4F